martes, 20 de mayo de 2014

Empecemos por el principio: Conceptos Básicos

http://www.dylar.es/Lecturas/Cuentos_infantiles/4_CUENTOS-SOBRE-CONCEPTOS-BASICOS.html


El conocimiento que adquieren los niños en los primeros años de su infancia, son fundamentalmente estímulos que se adquieren dentro del ámbito familiar y del entorno que les rodea. Conceptos como los  Colores, estados de ánimos simples como: la risa o el llanto, algunos números sencillos como las unidades y conceptos básicos relacionados con su entorno espacial: cerca-lejos, arriba-abajo, dentro-fuera... 


http://www.dylar.es/Libros/10/02.%20Pam-y-Pum.html



Todas estas nociones, también conocidas como opuestos, Dylar Ediciones las ha recogido en una colección de 12 cuentos bajo el nombre: Cuentos sobre Conceptos Básicos. 
En esta colección no se trata solamente de aprender los conceptos básicos como tales, ya que los niños tienen o empiezan a tener un conocimiento sobre ellos. Se trata fundamentalmente de afianzar los mismos, a través de la lectura de un cuento muy atractivo que les "engancha" desde la primera línea y, en donde son los propios conceptos básicos sus protagonistas. 
http://www.dylar.es/Libros/132/04.%20Lu-y-Po.html



Por otro lado, los Cuentos sobre Conceptos Básicos, se presentan en dos tipografías: una es la mayúscula y la otra la letra ligada o manuscrita. La razón de esta doble tipografía no es otra que facilitar el comienzo de la lectura, ya que los niños/as, por regla general, comienzan a leer en letra mayúscula y una vez conseguido este objetivo, se sigue leyendo con letra ligada o manuscrita.



http://www.dylar.es/Libros/135/07.%20La-ardilla-pardilla.html



Por último, no podía faltar en la línea editorial de Dylar Ediciones, al final de cada cuento, unas pequeñas actividades de afianzamiento y comprensión, que no son más que actividades de lectura comprensiva, que tanto nos caracteriza.


http://www.dylar.es/Libros/132/04.%20Lu-y-Po.html


Una colección con la que fijar los conceptos básicos, aprender a leer y con actividades de lectura comprensiva. ¿Hay algo más que se pueda pedir?


miércoles, 14 de mayo de 2014

Un libro, el mejor regalo que se puede hacer.



Entregar un libro envuelto para regalo es algo irreemplazable. Y un acto de amor, porque obliga a ponerse en el lugar del otro, a pensar en sus intereses. 
Frente a cualquier tipo de regalo, cuando regalas a alguien un libro, le estás diciendo mucho de sí mismo, de cómo le ves y de cómo eres tú.
Ilustración de Ajubel


Además, un libro es el regalo más personal, ya que implica a la conciencia y al gusto, tanto del que regala como del que lo recibe, y más perdurable, porque permanece doblemente en la memoria, como regalo y como texto a descubrir.

Citando a Antonio Muñoz Molina: “El libro es el mejor regalo porque tiene la máxima concentración de la experiencia humana. Ahí lo tienes todo, todo el mundo posible, toda la ficción, la realidad, todo está ahí”.



Son varias las fechas apropiadas para regalar libros, una de ellas son las comuniones, que en estas fechas se están celebrando. Una colección de libros como la de El Tejo Rojo o incluso el maletín de Cuentos para aprender ortografía son buenas ideas que desde Dylar Ediciones os recomendamos.


Otra ocasión por la proximidad de la fecha, sería el fin de curso. Muchos son los colegios que a sus alumnos les regalan libros cuando se termina un ciclo, como la Educación Infantil, como regalo de "orla". Para ellos os recomendamos nuestra colección de Colores o el Ratón Blanco, ambas colecciones son adecuadas para niños en esa etapa.


Y ya por último los cumpleaños, que dependiendo de la edad, los gustos y los intereses del niño, el libro para regalar puede ser cualquiera de la amplia oferta que Dylar Ediciones tiene.


Resumiendo, cualquier ocasión es buena para regalar un libro. Dylar Ediciones hace esta acción mucho más fácil y accesible. No dejes pasar la oportunidad y regala un libro a los más pequeños de la casa.

martes, 6 de mayo de 2014

El secreto está... en comprender lo que leemos



Saber leer no es solo poder descifrar un conjunto de letras y conseguir pronunciarlas correctamente. Si no somos capaces de comprender lo que hemos leído, habremos viajado a través de un hermoso paisaje con los ojos y oídos tapados.

Comprender nos posibilita recrear mentalmente los significados del texto que hemos leído, relacionando la información que nos ofrece el texto, con la información que ya poseemos.

Nuestra experiencia nos dice que no todas la personas comprendemos un texto de manera homogénea. Pero esto no significa que todas la interpretaciones sean válidas para la compresión y la comunicación. Las podremos considerar como válidas cuando seamos capaces de deducirlas a partir de la información que hemos leído. Cuando reconozcamos una misma idea formulada de diferente modo. Cuando seamos capaces de identificar palabras y frases claves y, cuando podamos sustituir las palabras del autor por palabras propias sin alterar el significado. Y sobre todo cuando seamos capaces de interpretar palabras desconocidas a través del contexto del texto.
 

Si somos capaces de potenciar estas habilidades, tendremos la herramienta perfecta para desempañar las situaciones de la vida cotidiana, en la que una buena comprensión lectora nos sacará de grandes apuros: cuando firmemos con el banco, el notario o el contrato del teléfono. Cuando leamos un prospecto médico o la receta de la paella. Cuando vayamos de viaje entre billetes y mapas...  o para perderse disfrutando de la lectura de un buen libro.